Londres infinito

Poco más se puede decir de esta gran ciudad de casi 8 millones de habitantes.

Desde mi punto de vista, es una ciudad que merece una visita frecuente para ir descubriéndola poco a poco. En realidad, con cuatro días tienes de sobra para conocerla, desde la perspectiva más turística, pero si lo que realmente quieres es vivirla, te aconsejo diferentes visitas a lo largo de los años y en estaciones del año distintas.


 



Hacía siete años que no pisaba Londres y quizás tenía demasiadas esperanzas puestas en el viaje.

El mes de diciembre es un mes extraño, lleno de fiestas, alegría desmesurada (falsa, diría yo) y consumismo exacerbado. Y eso fue lo que me encontré. Darse una vuelta por la zona centro: Oxford Street, Regent St, Picadilly, Leicester, Covent Garden era una lucha constante frente al gentío, las luces navideñas, los flyers y las grandes cadenas de ropa, perfumería y telefonía peleando por su parcela de ventas.

En cualquier caso, tú decides qué quieres ver y vivir. Lo indispensable para mí es:

-Camden Market: un mercadillo singular, vintage y lleno de encanto. Encontrarás de todo. Comida, bebida de distintos países así como ropa, láminas, cuadros y objetos de todo tipo. Espectacular.

-Soho y el West End: de lo más pintoresco de Londres, actualmente, de moda aunque se trataba de la zona más "chunga" de la ciudad hace unos años. Cualquier obra de teatro o musical que quieras ver, se encontrará en uno de los múltiples teatros que por esta zona tienen su sede.

-Grandes museos: British, National Gallery. Sin entrar en valoraciones sobre el expolio de obras, la verdad, es que son increíbles y de entrada gratuita. Si te gusta la civilización griega, romana y egipcia debes conocer el primero. Si te interesa el arte y quieres ver una retrospectiva general desde los grandes autores italianos, españoles, holandeses, el romanticismo, expresionismo, neoclasicismo, la National Gallery te está esperando. Entrada hasta las 18h, no está mal. Y visitas nocturnas guiadas el primer martes del mes.

-Parques: cualquiera te servirá para descansar y respirar aire fresco. Más grandes como Hyde Park o más pequeñitos y con más encanto como St James Park. En primavera y verano verás que su uso se extiende a comidas, juegos, debates, deporte, etc. Aire puro en el corazón de la ciudad.

Frikadas de mi última visita:

-221b de Baker Street: Me apasiona el mundo de Sherlock Holmes y no tuve más remedio que visitar su casa museo. Gracias a su guía, el Dr. Watson, se hace un recorrido muy ameno por su sala de estar y habitación y se puede saludar a los principales protagonistas de sus libros y archiconocidos enemigos.

-Museo de Sir John Soane: un arquitecto apasionado del arte que reunió en su casa miles de piezas de dibujos, pinturas y antigüedades. La verdad es que es una casa extraña y un tanto tétrica, pero es muy original y pintoresca. Se pueden ver obras de Canaletto y un sarcófago del faraón Seti I.

-Meridiano de Greenwich: Alejarse de la zona centro de Londres, cruzar el río en dirección sur y llegar a este encantador barrio te permite ver un precioso "sky line" de la City londinense y conocer otra zona de moda los "docklands". Aquí podrás ver el museo y el famoso meridiano que hace que Gran Bretaña ¿y España por qué no? tenga una hora menos, el planetario y el museo naval. Una magnífica excursión para desconectar de la saturada ciudad.