Bali I

Creo que en el imaginario colectivo todos creemos que Bali es lo más parecido al paraíso en la tierra. Lo imaginamos con playas paradisíacas y lujo al alcance de cualquiera. 

Ubud

Pues lo cierto es que a lo largo del viaje y en conversaciones con otros viajeros, su experiencia es justamente la contraria: nos transmiten que Bali no merece tanto la pena porque está demasiado explotada turísticamente, que es muy cara y, en general, que se han sentido decepcionados con la visita.

Así que ese sentimiento cala en nosotras y, a pesar de la ilusión que nos hace, estamos un poco indiferentes ante la perspectiva de la visita.

Ubud

 

 

Y lo cierto es que nos gusta desde el primer momento. Bali es distinta al resto de las islas que visitamos. Es hinduista y esa característica es visible desde el primer momento por la arquitectura que vemos en la isla, tanto en casas particulares como en templos, las personas van vestidas de la forma tradicional hinduísta y vemos, por doquier, pequeñas ofrendas de comida a la entrada a casas, tiendas, bares, templos, coches, etc. Lo cual es bastante curioso de ver.

Ofrendas

Es cierto que, desde el primer momento, se nota el cambio de isla y que hay mucha gente. En Bali viven 4 millones de personas. 

Desde Sanur, el puerto cogemos un taxi privado por 100.000rp cada una hasta Ubud, que es la ciudad elegida como punto de partida. Y desde allí recorreremos la isla en los escasos cuatro días que tenemos por delante, aunque después se quedarán en tres porque nos adelantan un vuelo de forma inesperada, el famoso G20 que se desarrolla en la isla, de forma paralela.

En Ubud, elegimos un homestay (Muka House) en el centro, que es un oasis de tranquilidad y podemos ir caminando a cualquier lado.

La calle principal de Ubud está plagada de comercios, de gente, de motos, de coches es una Gran Vía, venimos de un sitio pequeño y tanto ruido y gente nos sorprende.

La primera tarde nos damos un paseo tranquilo por la ciudad y contratamos excursiones para los siguientes días. Tenemos el problema de que ¿no sabemos? o ¿queremos? coger la moto, así que solo nos queda el taxi privado.

Monkey Forest

Al día siguiente, hacemos el siguiente recorrido: Monkey Forest, Taman Ayun, Pura Ulun Danu Bratan y Jatiluwih campo de arrozales. Nos lleva todo el día. En cada sitio hay que pagar entrada y, en algunos templos, ponerse un sarong que cubra las piernas si las llevas al descubierto. Nos cuesta el conductor todo el día 600.000rp en total.

El Templo de los Monos (80.000rp)  es espectacular y muy divertido, no hay tantas diferencias entre los humanos y los monos. Están por doquier y los vas a ver comiendo, acunando a sus hijos, limpiándose, durmiendo...

Compadreo

Monkey Forest

Taman Ayun (Bello Jardín), 30.000rp la entrada, es un  templo, creado en 1634, se extiende sobre un terreno de 250 por 100 metros a lo largo de los cuales se extienden preciosos jardines, un foso y varias merus (pagodas) de diferentes alturas. No es posible acceder al interior de la zona más sagrada del templo.

Taman Ayun

Taman Ayun

De ahí, nos vamos a la montaña para visitar Pura Ulun Danu Bratan, el templo flotante que está ubicado en el Lago Batur formado en el cráter del Volcán Mount Catur conocido como el Lago de la Montaña Sagrada. 

Pura (templo al aire libre) Ulun

 

El sitio es espectacular. Fue construido en el Siglo XVIII para honrar a la Diosa del Lago Dewi Danu encargada de repartir el agua  en forma de regadío a toda la Isla de Bali.

Pura Ulun

Sorprendidas por tanta belleza y muertas de frío (estamos a gran altura y encima, llueve), nos vamos a visitar un campo de arrozales, Jatiluwih (40.000rp + 5.000rp parking), Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 2012, y que nos deja sin palabras. Allí vemos el atardecer. Me gustó tanto, sientes tanta paz y hay tanta belleza que creo, te puedes pasar el día entero allí. Solo allí. Caminando, disfrutando, tomando algo. En silencio. Lo puedes recorrer caminando o en bicicleta.

Jatiluwih

No es tan famoso como Tegalalan, por eso hay menos turistas. 

Son 300 hectáreas de paisaje natural, el conjunto de terrazas, combinado con palmeras y las calderas del Tamblingan, Buyan y Bratan a un extremo.

Jatiluwih

El complejo sistema de irrigación de Bali conocido con el nombre de subak fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en el año 2012. Este sistema de gestión del agua se empezó a utilizar en el siglo IX cuando los balineses encontraron la forma de desviar el agua de las fuentes de las montañas a todas las comunidades situadas a las bases de éstas. De estas forma no solo las poblaciones situadas cerca de los manantiales se beneficiaban del agua, sino que el reparto se hacía de forma equitativa, llegando también hasta las poblaciones mas alejadas del manantial.

Jatiluwih

El Tri Hita Karana es una filosofía tradicional para la vida en Bali y se traduce como las tres causas del bienestar o las tres razones de la prosperidad. Estas tres causas a las que se refiere el Tri Hita Karana son: la armonía con Dios, la armonía entre las personas y la armonía con la naturaleza o el medio ambiente.

El principio del Tri Hita Karana está presente en muchos aspectos de la vida balinesa, desde los rituales diarios o la organización espacial en la arquitectura balinesa, pero también se ve reflejada en el sistema de irrigación tradicional, el subak.

Jatiluwih

 Y con este cierre espectacular, volvemos a Ubud sobrecogidas, para cenar en un Warung coqueto de nuestra misma calle. Nos espera un día duro.

 

Preparadas para coger arroz